CHIMALHUACÁN.- Días antes de que las familias acudan a visitar las tumbas de sus seres queridos, por la celebración a los Fieles Difuntos, el Panteón Los Rosales, como en años anteriores, sufre el saqueo de tumbas, donde amantes de lo ajeno se apoderan de costosos floreros de mármol e imágenes metálicas, y la minuciosa precisión en desprender estos objetos provoca la sospecha de que hampones y vigilantes estén coludidos.
Efectivamente, en el recorrido realizado por el corresponsal de este medio informativo en los pasillos del cementerio Los Rosales, arrojo un dato siniestro: Las tumbas son asaltadas por vivales que roban objetos como floreros de mármol y figuras religiosas de metal que obligan a los familiares de los difuntos a volver a comprar estas costosas piezas.
No hay un solo pasillo donde deje de observarse el desprendimiento exacto de floreros de mármol ya que estos son desprendidos o cortados con maquinaria especial que obligadamente produce algún tipo de ruido que provocaría la alerta en la vigilancia del lugar pero, se sospecha de la colusión, de la componenda, de la complicidad con el responsable de la vigilancia de este cementerio.
La señora Gabriela Villegas Garduño, quien fue a visitar y a llevar flores a la tumba de su madre, dijo a Reporteros en Movimiento que el año pasado el sepulcro fue saqueado, le habían robado el par de floreros de mármol, y que al quejarse con el responsable de la vigilancia este le pidió unos días para ver si en la bodega ellos tenían unos iguales y si, efectivamente, ahí a un par días le dio unos idénticos, muy parecidos a los que le habían robado.
“Me los llevo a una oficina que esta aun costado de la administración y ahí me los entrego sin ningún costo de dinero, y esto me hizo sospechar de el”
Este hecho le hace pensar que nuevamente los amantes de lo ajeno, que probablemente están coludidos con este sujeto, hayan hecho de las suyas para ganarse fuertes cantidades de dinero extra, ya que en los locales donde se fabrican estos objetos de mármol tienen un costo de mil pesos el par.
Vía Reporteros en Movimiento.
