NEZAHUALCÓYOTL.- Jovanna Areli le cumplieron las amenazas de muerte que había recibido por su cargo como Agente del Ministerio Público de la Fiscalía mexiquense (FGJEM).
Por estos amagos, la funcionaria de 30 años –quien se desempeñaba como secretaria particular de la Fiscalía de Homicidios en Ixtapaluca-, había solicitado protección, revelaron elementos cercanos al caso.
“Había tenido dos audiencias y solicitó protección porque recibió amenazas”, dijo una de las fuentes.
Desde pequeña, Jovanna estuvo vinculada a las instituciones de procuración de justicia, pues sus familiares cercanos son agentes ministeriales.
La noche del martes, ella conducía un Chevrolet Malibú blanco, sobre los carriles centrales de la Avenida Adolfo López Mateos rumbo a su casa; al mismo tiempo, sujetos en una motocicleta la acechaban.
Los sicarios aprovecharon que la agente iba sola y le dispararon en al menos siete ocasiones cuando se encontraba a la altura de la Calle Flamingos, en la Colonia Metropolitana Segunda Sección, en Nezahualcóyotl.
La mujer se desvaneció al volante y su vehículo avanzó sin control invadiendo el sentido contrario y un camellón, donde se detuvo. A unos metros del auto quedaron siete cartuchos percutidos calibre .9 milímetros.
Vecinos aseguraron que uno de los responsables era un hombre vestido con una sudadera roja y una mochila verde, quien huyó en una moto de pista negra hacia la Ciudad de México.
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