NAUCALPAN.- En verdad que, éste órgano de gobierno es históricamente el de mayor “ausencia, quebrado y cojo”.
En ello, donde sus ediles además se han convertido en los más faltistas de todos los ayuntamientos del estado de México, pese a las observaciones y ser sancionado con una multa del órgano de fiscalización Osfem.
A más de dos años de mandato de Olvera, alrededor del 95 % de sus sesiones, llámense ordinarios, extraordinarias o solemnes, no han podido alcanzar la totalidad de sus miembros.
Lo anterior, aún y cuando por ley, es suficiente lograr el quórum, es decir el 50 % más uno de 20 representantes populares: un alcalde, tres síndicos y 16 regidores.
Sin embargo, y para mal lo es el hecho de que en este periodo de tiempo, la comuna edilicia registre un número importante de concejales con incapacidad, permisos y faltando.
De alguna u otra manera, sesión tras sesión, podemos observar justamente deliberaciones con 14, 15, 16, 17, 18 o 19 ediles-siempre por alguna razón alguien no asiste y hay todavía quien se sale del recinto-
Por otra parte, éste cabildo el de “la alternancia pública”, también es histórico en el sentido y con eso de la equidad de género, el que prueba de al menos tres ediles, la dicha de volver a ser madres, y junto con el munícipe Olvera, ser padre de familia .
Pero igual, y en otros casos emitir una y varias justificaciones para de plano, incumplir con una responsabilidad y compromiso con la sociedad y/o el electorado que les concedió su voto.
En ese orden y asimismo, otorgarles el beneficio de la duda y que hoy en realidad, es una alta carga del erario público para mantener, salvo sus honrosas excepciones, a unos “zánganos”.
No podemos dejar a un lado, que así también e históricamente, éste sea uno de los órganos de gobierno de más bajo perfil, para un municipio como lo es Naucalpan.
Si y ciertamente están dejando bastante de que hablar, en indefinidad de asuntos que merecen una investigación más profunda, y ahí están los planes parciales de incorporación territorial, es decir cambiar drásticamente los usos del suelo, densidades y modificación de los entornos urbanos-
El arrendamiento, los proyectos de concesión de los servicios públicos, por ejemplo como el bacheo, el alumbrado público y el pago del alquiler de Lámparas Led, y de numerosas empresas que viene operando para el cobro de los impuestos municipales-predio, catastro, estudios de aguas residuales recomendados por el Oapas, entre otros.
Finalmente, un cabildo que no aporta, que no propone, que no debate, en el que las sesiones de cabildo son simplemente de trámite y que dan pena ajena.
Por Mario Ruiz Hernández.
