NAUCALPAN.- Ante los múltiples robos a casa-habitación, de autopartes y a transeúnte, vecinos del fraccionamiento Lomas de Huizachal, en Naucalpan, llevan más de un año solicitando al gobierno municipal que les permita la instalación de dos casetas de vigilancia en las calles Francisco I. Madero y Nicolás Bravo, para reforzar la seguridad privada en las 48 calles que conforman este residencial, sin que, hasta ahora, hayan obtenido alguna respuesta de la administración local.
El presidente del Consejo de Participación Ciudadana (Copaci) de Lomas de Huizachal / Héroes de la Revolución, Rubén Valdés Velasco, detalló que el proyecto consiste en la instalación de dos casetas de vigilancia que serían adaptadas con cámaras de monitoreo y plumas para generar un registro de quienes ingresan al fraccionamiento conformado por dos mil viviendas y, de esta forma, aminorar el acceso de personas desconocidas que se dedican a delinquir en esta región.
«La mayoría de las personas que viven en este fraccionamiento son adultos mayores que se encuentran en riesgo en caso de que ocurra un hecho delictivo, por eso queremos llevar un registro de quienes entran a nuestras calles, pues sabemos que no podemos impedir el acceso», señaló.
Indicó que, a pesar de que los colonos han cumplido con los requisitos marcados en el reglamento que regula el cierre de espacios públicos en Naucalpan y de que Protección Civil ya realizó el estudio de las calles, el coordinador municipal de esta dependencia, Carlos Alejandro Sánchez González, ha puesto diversas trabas para impedir el cierre de este fraccionamiento, entre las que destaca el cumplimiento de firmas vecinales y de los elementos de seguridad y protección civil al interior de las casetas, como extintores, botiquín de primeros auxilios y un arenero, entre otros, aunque no se hayan autorizado aún las mismas.
«Hace varios años, funcionó el cierre de cuatro calles con macetones y, posteriormente, con rejas, porque así dejaron de ingresar por la parte de atrás sujetos en motocicletas que solo se dedicaban a robar, pero ahora le dan la vuelta al fraccionamiento y entran por los accesos principales para seguir robándonos, así como a nuestras viviendas, por eso requerimos la instalación de las casetas de vigilancia», subrayó.
El modus operandi
Las cámaras de videovigilancia de diversas viviendas de este fraccionamiento han registrado el actuar de las bandas delictivas que llegan a este residencial, conformado en su mayoría, por militares en retiro y sus familias. El objetivo: robar autopartes u objetos que se dejan al interior de los vehículos que son estacionados en las calles o para asaltar a transeúntes y despojarlos de sus celulares y/o carteras.
Los videos muestran que al menos dos sujetos ingresan de día a bordo de una motocicleta para asaltar a quienes caminan por las calles, mientras que ha sido captado otro sujeto más que recorre el fraccionamiento a pie para robar autopartes, como espejos retrovisores y calaveras.
En tanto, otro hombre más que viajaría a bordo de un vehículo negro también fue captado durante la madrugada abriendo un vehículo particular, para sustraer las pertenencias que se encontraban en el interior.
En las grabaciones se observa cómo el hombre estaciona su vehículo al lado del que va a robar y se toma el tiempo necesario para quitarle la funda que lo protege del clima. Tras inspeccionarlo, abre una de las puertas traseras y extrae las pertenencias.
En otros casos, los vecinos han observado la presencia de taxistas provenientes de otras localidades de este municipio o de demarcaciones vecinas, quienes alegan que solo están descansando en el lugar; sin embargo, consideran que pueden ser «halcones» que solo se dedicarían a revisar el movimiento de las calles y verificar si una vivienda está desocupada.
Todos estos eventos, fueron cometidos durante la contingencia sanitaria del covid-19 y, a pesar de que los vecinos señalan que existe una excelente coordinación con la policía municipal, a través de una red vecinal de WhatsApp, en la que los colonos reportan cualquier actividad extraña de desconocidos.
Operaba una banda de colombianos
El pasado miércoles, estas acciones permitieron que policías municipales de Naucalpan detuvieran a cuatro jóvenes, tres de ellos de nacional colombiana y una más mexicana, identificados como Alfonso «N», Raúl Osvaldo «N», Andrés «N» y Natalia «N», de 23, 24, 29 y 25 años de edad, respectivamente.
Tras el reporte, los elementos se trasladaron a la calle Leandro Valle de este fraccionamiento y, al arribar, notaron la presencia de un vehículo sospechoso, quien, en un intento de huir, chocó contra la patrulla, por lo que los agentes solicitaron a los ocupantes que descendieran para realizar una inspección. Ahí localizaron dos armas cortas, guantes, desarmadores, pinzas de presión y de corte, además de un juego de placas vehiculares.
De acuerdo con autoridades locales, se trabaja para identificar si esta banda estaría implicada en otros robos a casa-habitación que se han cometido en la zona.
No existe censo de calles cerradas
La negativa de la instalación de las casetas se registra, a pesar de que el pasado 19 de febrero, los integrantes del Cabildo aprobaran el Reglamento para la Implementación de Dispositivo de Seguridad, con el que se permitía a los vecinos colocar dispositivos como rejas, plumas, casetas o filtros para controlar el acceso a colonias de esta demarcación y como una medida para reducir los actos delictivos en las zonas.
«Desde hace un año, nos traen vuelta y vuelta en el palacio municipal para otorgarnos el permiso, pero no hemos encontrado una respuesta. No sabemos si quieren que les ofrezcamos para el refresco o algo para que aceleren el permiso, pero no lo vamos a hacer, porque hemos cumplido con todo lo que se nos ha pedido. Sabemos que, con la pandemia se pudo retrasar el trámite, pero ya llevábamos casi diez meses solicitándolo», asegura el presidente del Copaci.
La Silla Rota solicitó al gobierno municipal conocer cuántos permisos se han otorgado desde la aprobación del reglamento que regula el cierre de calles, sin que, hasta la publicación de este trabajo, se haya obtenido una respuesta.
No obstante, la décima regidora y promovente del Reglamento para la Implementación de Dispositivo de Seguridad, María Paulina Pérez González, señaló que, hasta ahora, los integrantes del Cabildo no han sido notificados sobre el censo de calles que permanecen cerradas o de las que se ha recibido alguna solicitud para hacerlo, a pesar de que el acuerdo que se suscribió en febrero, establecía que la Secretaría de Movilidad de Naucalpan estaba obligada a hacerlo en un periodo máximo de 60 días naturales, por lo que esta semana se ingresará un oficio para pedirle a la dependencia municipal que cumpla con lo mandatado.
Vía La Silla Rota.