NAUCALPAN.- Aún cuando el Artículo 28 de la Ley Orgánica Municipal del Estado de México establece que los ayuntamientos deberán sesionar cuando menos una vez cada ocho días o cuantas veces sea necesario en asuntos de urgente resolución o que éstos podrán declararse en sesión permanente cuando la importancia del asunto lo requiera, los 20 integrantes del Cabildo de Naucalpan se ausentaron de sus labores desde el pasado 27 de marzo, aunque los tres síndicos y 16 regidores han seguido cobrando su salario íntegro durante la contingencia sanitaria.
A pesar de que el resto de los municipios mexiquenses han llevado a cabo sus sesiones ordinarias y extraordinarias en esta contingencia provocada por el COVID-19, respetando las disposiciones de Sana Distancia, el cuerpo edilicio de Naucalpan sesionó el 27 de marzo por última vez, cuando aprobó el “Acuerdo por el que se atienden las recomendaciones del gobierno federal para prevenir la propagación del COVID-19 (coronavirus) y garantizar el derecho humano a la salud” y, desde entonces, se generó un vacío legal en la administración encabezada por la alcaldesa Patricia Durán Reveles.
En aquella sesión, los integrantes del Cabildo acordaron suspender las actividades no esenciales del gobierno municipal hasta el 20 de abril, al tiempo en que establecieron que se dejaba sin efectos el Resolutivo Segundo del Acuerdo Número 01-SO/2019/3, por medio del cual también se cancelarían las sesiones del Ayuntamiento hasta nuevo aviso, a pesar de que la ley estatal no estipula que los ediles puedan considerar esta atribución.
Por si fuera poco, no solo modificaron el resolutivo a su favor, sino que aprobaron la creación del Consejo Municipal de Emergencia para la Atención del COVID-19; órgano al que le dieron atribuciones deliberativas y ejecutivas para dictar las medidas necesarias para prevenir la propagación del COVID-19, bajo la dirección de la propia alcaldesa y con el respaldo del secretario del Ayuntamiento, Joaquín Arturo Colín Marín, un secretario técnico y once vocales, incluyendo al primer síndico Maximiliano Alexander Rábago; al secretario de Gobierno, Mauricio Aguirre Lozano y otros funcionarios de la administración municipal, los cuales han asumido las decisiones de este gobierno durante la contingencia sanitaria, pese a no estar reconocidos por la normatividad estatal.
Y, a pesar de que el pasado 05 de mayo entró en vigor la adición al cuarto párrafo del Artículo 28 de la Ley Orgánica Municipal, promovida por el primer síndico de Naucalpan, en la que se establece que, en caso de emergencia nacional o estatal, de carácter sanitaria o de protección civil, los ayuntamientos podrán sesionar a distancia, mediante el uso de tecnologías de la información y comunicación o medios electrónicos disponibles, hasta el momento, los ediles y la presidenta municipal continúan sin sesionar, aun cuando la misma ley señala que los integrantes del Cabildo no podrán ausentarse por un periodo mayor de 15 días o, de lo contrario, se tendrá que convocar a sus suplentes, lo cual tampoco sucedió.
Reconocen error
Al respecto, el primer síndico de Morena, Maximiliano Alexander Rábago, reconoció la omisión que tuvo el cuerpo edilicio desde el inicio de la fase 2 de la pandemia, pues el Ayuntamiento no podía dejar de sesionar durante la contingencia sanitaria, ya que se podría presentar la autorización o rechazo en la contratación de algún servicio para atender la emergencia o para supervisar el buen manejo de los recursos públicos y hacer reconducciones al presupuesto, si fuera el caso.
Desde el principio, yo me opuse a que dejáramos de sesionar desde hace casi dos meses, porque era ilegal de acuerdo a los que establece el Artículo 28 de la Ley Orgánica Municipal, en donde se estipula que tenemos que sesionar cuando menos una vez a la semana, ya sea de forma ordinaria o extraordinaria, con dos puntos o cinco, y guardando la sana distancia, pero cómo sea teníamos que sesionar.
El órgano de gobierno es el Ayuntamiento y no existe justificación. Miles de naucalpenses salen todos los días a trabajar con el riesgo de contagiarse y no fue correcto que nosotros nos resguardáramos”, afirmó.
Indicó que, si bien legalmente no existían condiciones para sesionar a distancia al inicio de la contingencia, a partir de la iniciativa que presentó ante la 60 Legislatura del Estado de México en su calidad de ciudadano y que fue aprobada por los diputados locales, no existen pretextos para que no sesione el Cabildo; no obstante, hasta ahora, ni la presidenta municipal ni el secretario del Ayuntamiento los han convocado.
Los municipios tienen una esencia colegiada, lamentablemente, en el Estado de México hay un presidencialismo exacerbado, en el que los alcaldes luchan por tener un lugar especial en la historia del municipio, pero ellos no gobiernan, ellos solo ejecutan órdenes del Ayuntamiento, por eso espero que se nos convoque pronto a las sesiones; yo he estado insistiendo en que esto ocurra, porque, de lo contrario, se podría considerar un abandono de funciones del encargo, lo que podría generar dos mecanismos de sanción graves, como la revocación de mandato de los miembros del ayuntamiento o la suspensión o desaparición”, apuntó.
Por su parte, la décima regidora del PAN, Paulina Pérez González, también reconoció que, a pesar de la contingencia sanitaria, las obligaciones del Ayuntamiento no están suspendidas, pues a éste le competen las decisiones presupuestales o de política pública, por lo que afirmó que ahora que existen las condiciones para sesionar a distancia es urgente que el Cabildo retome sus actividades y exija que el gobierno municipal presente un informe de las acciones que se han llevado a cabo durante este periodo.
El acuerdo del consejo en el que se estableció la suspensión de las sesiones ordinarias ya venció en abril y hoy existe una modificación en la ley para sesionar a distancia, pero a pesar del fundamento legal no nos han convocado. No hay excusa, por eso ahora estamos insistiendo con oficios en que ya retomemos las funciones, pues es nuestra obligación como ediles”, agregó.
El onceavo regidor del PRD, Anselmo García Cruz, justificó que aunque la Ley Orgánica Municipal establece con precisión que el Cabildo debe sesionar regularmente, las medidas de sana distancia que aprobaron a nivel federal durante la contingencia sanitaria, estipulaban que no podía haber reuniones de más de 30 personas en un mismo sitio, lo que generaba complicaciones para poder hacerlo, aun cuando son solo 20 integrantes.
En lo personal, tuvimos dudas, pues si la idea era evitar o garantizar la seguridad o la salud de todos estaba bien por un tiempo preventorio y más allá de eso, pero ahora con esta reforma que sufrió Ley Orgánica, no hay razón por la que no se tenga que sesionar bajo ninguna circunstancia”, mencionó.
La décimo cuarta regidora del PRI, Angélica del Valle Mota, argumentó que la llegada de la pandemia y la falta de mecanismos legales para poder sesionar a distancia ocasionaron confusiones entre los integrantes del ayuntamiento, las cuales provocaron este vacío en el gobierno local; sin embargo, aclaró que, una vez que existen los elementos jurídicos para hacerlo, es indispensable que se haga a la brevedad, aunque no han sido convocados, bajo el pretexto de que el Gobierno Digital no está preparado para sesionar vía remota.
Estuvo mal que se aprobara un consejo, aunque siempre dijimos que no tenía facultades ejecutivas y dejamos abierta la posibilidad de sesionar virtualmente, el tema es que la Secretaría del Ayuntamiento no quiso hacerlo en todo este tiempo y aunque existen aún resistencias para convocarnos, la ley establece que la mayoría de los miembros también pueden llamar a sesión y estamos en ese proceso”, dijo.
Hoy Estado de México solicitó información acerca del por qué los miembros del ayuntamiento no habían sesionado en las últimas dos semanas a pesar de la reforma a la Ley Orgánica Municipal que permite las reuniones a distancia y la Dirección de Comunicación Social informó que el secretario del Ayuntamiento estaba enfocado en el tema de la emergencia sanitaria.
La remuneración mensual bruta de un síndico de Naucalpan es de 106 mil 747.86 pesos y de un regidor es de 94 mil 639.86 pesos.
Vía Hoy Estado.