NAUCALPAN.- Un tribunal federal declaró en favor del Gobierno la extinción de dominio sobre una casa valuada en 5 millones de pesos en Lomas Verdes, Naucalpan, que era usada como almacén del narcotráfico.
La residencia, ubicada en el número 7 de la calle Robles Pezuela, Sexta Sección de Lomas Verdes, está a nombre de Yamilet Araujo López, esposa del narcotraficante que fue abatido durante una balacera con elementos de la Armada de México en calles de la Zona Azul de Satélite, el 5 de noviembre 2014.
Ese fue el peor enfrentamiento entre criminales y militares que ha ocurrido en esa zona de la ciudad, y costó la vida a un narco de nombre Jorge, apodado «El Morro», cuya identidad nunca se ha revelado públicamente.
La balacera ocurrió cuando «El Morro» abrió fuego contra los Marinos al salir de otra casa de seguridad, en el 188 de Circunvalación Poniente en Ciudad Satélite, donde había 54 kilos de cocaína.
«El Morro» murió en el lugar y cuatro cómplices fueron detenidos en diversos momentos, uno de ellos cuando se atendía una herida en el hospital Star Médica. Uno de los cómplices confesó que operaban en una casa de Lomas Verdes.
Esta última fue cateada dos días después de la balacera. Fueron detenidos dos veladores y se hallaron 316 paquetes de cocaína, dos vehículos, básculas, dólares y máquinas contadoras de dinero, según la sentencia consultada por REFORMA en la que fueron censurados los nombres de los implicados.
La casa, que tiene fácil acceso a la autopista Chamapa-Lechería, fue comprada el 30 de agosto de 2013 y puesta a nombre de Araujo.
«Se acreditó que la demandada conocía a (El Morro), con quien estaba casada, asimismo se tuvo por evidenciado que (El Morro) adquirió el inmueble, pero que fue registrado a nombre de Araujo López, pues ésta al ser ama de casa no percibe ingresos con los cuales adquirirlo», afirmó el Primer Tribunal Unitario en Materia Civil y Administrativa.
Araujo estaba dada de alta ante el SAT desde 2013 en el régimen de actividades agrícolas, ganaderas, silvícolas y pesqueras, pero nunca reportó ingresos o ganancias y tampoco probó haber recibido una herencia o crédito bancario.
El tribunal unitario confirmó el 4 de julio la sentencia de un juez que declaró la extinción de dominio, aunque está pendiente un amparo directo promovido por Araujo, que será la última instancia y resolverá el Décimo Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil.
Cabe mencionar que Araujo alega el indebido emplazamiento al juicio de extinción de dominio, que se hizo por edictos. Este tema aún puede ser revisado por el tribunal colegiado.
De ser negado el amparo a Araujo, la casa pasará a control del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), para que lo venda y deposite los recursos en un fideicomiso previsto por la Ley de Extinción de Dominio.
Vía Reforma.