NAUCALPAN.- La percepción de inseguridad de los mexicanos repuntó al cierre del 2021 y Fresnillo, Ciudad Obregón y Naucalpan encabezaron el top de ciudades en las que sus habitantes se sienten más inseguros respecto de la delincuencia y violencia.
Al corte de diciembre, en promedio, el 65.8% de los mexicanos consideró que vivir en su localidad es inseguro, mientras que en ciudades como Fresnillo, Zacatecas casi el total de sus habitantes consideran que hay inseguridad (96.8%), de acuerdo con cifras de la ENSU (Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana) del Inegi.
Por su parte, en Ciudad Obregón, Sonora y Naucalpan, Estado de México, el 95.0 y 92.1% de la población se siente insegura de vivir ahí, respectivamente.
La percepción de inseguridad también es mayor para la población femenina: 7 de cada 10 mujeres se sienten inseguras en donde viven. Para los hombres la cifra es 6 de cada 10.
Los cajeros en vía pública, el transporte público, el banco, la vía pública y las carreteras son los lugares en los que los mexicanos se sienten más inseguros. Y la mayoría de la población no tiene buenas expectativas sobre la seguridad pública, el 59% considera que se quedará igual de mal o incluso empeorará.
La inseguridad y violencia en México, además, ha empujado a la población a cambiar sus hábitos cotidianos o dejar de hacer cosas para prevenir. 6 de cada 10 personas han cambiado su vestimenta o los objetos que lleva por miedo a ser víctima de un delito y 5 de cada 10 dejó de salir de casa por las noches.
Los mexicanos aprueban a la Marina y el Ejército
Aunque el optimismo sobre una mejora en la seguridad pública del país es bajo, los mexicanos mostraron un mayor nivel de aprobación a las fuerzas armadas que a los cuerpos de policía locales.
El 84.7% de la población consideró que el desempeño de la Marina es muy o algo efectivo; para el Ejército la cifra fue de 82.8 por ciento. Para la Guardia Nacional el apoyo fue de 72.9% de la población.
En contra parte, sólo 4 de cada 10 (43.1%) mexcicanos consideró como efectivo el desempeño de los cuerpos preventivos policiales.
Vía El Economista.
