NAUCALPAN.- Debido a factores ambientales, de tránsito, regulaciones, altos costos de terrenos, que no hay más espacios para la expansión y conflictos con vecinos, los parques y zonas industriales en la Zona Metropolitana del Valle de México presentan puntos de inversión pero también una tendencia desindustrializadora con la salida de factorías, sobre todo en Naucalpan y Tlalnepantla.
En el primero la tendencia es irreversible y en el segundo, las autoridades han procurado que los predios industriales modifiquen su uso desuelo a comercial para evitar pérdidas de inversiones y empleos, que en algunos casos son mejor pagados.
Francisco Cuevas Dobarganes, dirigente de la Unión Industrial del Estado de México (UNIDEM), dijo que esa propensión choca con lo que sucede en Tultitlán, Tepotzotlán, Cuautitlán México y Cuautitlán Izcalli, donde “afortunadamente registran muy buenas inversiones, pero principalmente enfocadas a centros de distribución”.
También sostuvo que en la región de Toluca, Lerma y Ocoyoacac, los espacios industriales registran buena ocupación y solo quedan algunos de empresas textiles y químicas que cerraron hace algunos años por problemas de competitividad, “pero en general el Toluca 2000, Toluca, San Cayetano, Exportec, Cerrillo, Lerma y Doña Rosa tienen pocas áreas disponibles”.
A pesar de que el gobierno del estado apoya las inversiones que buscan asentarse en esa región, esa práctica debería complementarse con una legislación flexible para que sea más sencillo invertir “pues para obtener el Impacto Regional y posteriormente el Uso de Suelo, el trámite puede llevar hasta dos años”. En Naucalpan y Tlalnepantla, detalló, el costo del terreno por metro cuadrado hace inviable invertir, incluso si una empresa quiere crecer.
“Comprar predios vecinos a precios razonables es casi imposible. En esos municipios los costos pueden variar de los 6 mil pesos por metro cuadrado, en extensiones grandes y sin vocación comercial, hasta los 40 mil pesos en predios medianos y pequeños con buenas ubicaciones y potencial es para uso comercial”, refirió.
En Naucalpan, como sucedió en Vallejo y Granjas México en la Ciudad de México, “el proceso de desindustrialización luce ya irreversible; Alce Blanco, La Perla y Atoto registran ya menos de 35 por ciento de superficie para uso industrial y la mayor parte ha migrado su uso a centros de distribución”, y pagar impuestos prediales tan altos y al mismo tiempo tener problemas viales y con los vecinos, implica que las industrias pierdan competitividad.
“En Tlalnepantla, también con altos costos de predios, el gobierno municipal ha sido cuidadoso de que las tierras industriales que se pierden cambien su uso para fines comerciales o de oficinas, lo que lejos de representar pérdida de empleos, en algunos casos se obtienen más e incluso mejor pagados.
“El municipio ha mejorado sus procesos internos y está muy bien calificado en el Doing Business, lo que permite que las inversiones crezcan y generen mayor prosperidad”, expresó. En relación con Ecatepec, destacó que desde 1994 se ha tratado de blindar a las zonas industriales y no pierden espacios importantes y, en cambio, “ha recibido muchas empresas que han migrado de otros lados, incluyendo la Ciudad de México.
“Las cuatros zonas de Xalostoc y las de Santa Clara, Cerro Gordo, Tulpetlac y Jajalpa registran ocupaciones que van de 60 por ciento en laRústica Xalostoc hasta el 100 por ciento en Jajalpa. Actualmente tiene los problemas de tráfico por la obras del Mexibús que llevan dos años y medio y el de la percepción de inseguridad, asuntos que esperamos se resuelvan en el próximo año y puedan fluir más inversiones”, explicó.
Sobre Cuautitlán Izcalli mencionó que tuvo muchos problemas y salidas de empresas en los últimos seis años, debido a inseguridad y falta de pavimentación, pero “con la administración que entró se iniciaron los trabajos para rehabilitar La Luz, La Joya, Cuamatla y Xhala, que eran las más afectadas”.
FUENTE: http://www.milenio.com/
