NAUCALPAN.- JP Rivas Escribió; Su nombre es Pedro Cortés González y supuestamente es policía municipal de Naucalpan de Juárez, Estado de México. La madrugada de este domingo 1 de abril el señor junto con tres o cuatro acompañantes, nos pidieron detenernos (mi novia iba de copiloto) a la altura del hospital de traumatología de Lomas Verdes, sobre Periférico, sin ningún motivo aparente. Fue imposible ver los números de la patrulla debido a que se estacionaron detrás de nosotros y al momento de hacerlo encendieron las luces altas imposibilitando la vista del número de unidad.
Se acercó a la ventanilla y puso la cara frente a mí, y cuando le dije buenas noches se retiró como si mi aliento fuera excesivamente alcohólico, cosa que no era así ya que yo había dejado de beber aproximadamente dos horas y media antes del encuentro. Me preguntó que si había bebido y respondí que únicamente dos cervezas y entonces me dijo que venía manejando en estado de ebriedad. Como desde el inicio el hombre me puso la luz de su celular en la cara, asumí que estaba grabando por lo que a su vez comencé a hacer lo mismo.
El resto puede verse claramente en el vídeo que publico a continuación.
En una detención a todas luces arbitraria, pues en ningún momento venía manejando a exceso de velocidad ni tampoco de manera imprudente o zigzagueando, este supuesto oficial de policía municipal y no de tránsito, nos pidió orillarnos en una zona muy poco iluminada, sin una razón aparente.
Aunque inicialmente nos dio su nombre, como puede apreciarse en el vídeo, jamás nos dio su número de unidad y pedía de manera insistente que bajara del auto. Por otro lado, en el minuto 4:45 del vídeo, el hombre me arrebató el celular al tratar de grabar su rostro, cuestión que se puede ver en la manera en que se mueve la cámara y que unos cuantos segundos se queda grabando desde fuera del auto.
Posteriormente yo le quité de nuevo el teléfono en un movimiento rápido que una persona en supuesto estado de ebriedad seguramente habría sido imposible de hacer, en el vídeo puede apreciarse como lo cuestiono por haberme quitado el teléfono. La última parte de esta lamentable situación ocurrió en la transmisión en vivo, que al parecer fue lo que más lo intimidó pues comenzó entonces a hacer acusaciones graves, como cuando dice que yo traté de sobornarlo, cosas que NUNCA pasó, de igual manera asevera que venía drogado, sin ningún fundamento.
Afortunadamente en el vídeo que tomé se asoma ocasionalmente su rostro por lo que adjunto las capturas de pantalla donde puede verse. Es increíble, pues en el Estado de México ni siquiera circulando en tu automóvil particular estás a salvo, si no son los pinches ratas, son estos hijos de perra que buscan intimidarte y extorsionarte. Aún así hay gente que se cierra de ojos y se atreve a decir que en el Estado de México las cosas no están tan mal o que es una opción viable seguir votando por ese puto partido que tanto nos ha jodido en diferentes niveles, económico, político, pero sobre todo a través del fomento de esta podredumbre social, en la que el policía (no todos, pero muchos) es uno más en una larga lista de bastardos cuya vida sólo adquiere sentido al chingarte.
A pesar de que la Ciudad de México no es un lecho de rosas, en los cinco meses que llevo viviendo aquí jamás me he sentido tan asquerosamente vejado en mis derechos como en este episodio mexiquense. Ojalá que puedan ayudar a compartir esta publicación y que al menos a través de redes sociales se difunda el rostro y el nombre de este tipo para que estén alerta y cuando lo vean no caigan en sus juegos de intimidación y también salgan adelante de la misma forma en que nosotros tuvimos la fortuna de hacerlo, y digo fortuna porque estando en esa puta cloaca que llaman Estado de México y en esa situación es inevitable pensar en palabras como desaparición, extorsión, secuestro, violación, feminicidio, homicidio e innevitable pensar si es posible que te conviertas en un número más, en otro pinche titular en El gráfico, en otra noticia de tv, en otro «¿Viste lo que le pasó a XYZ? -Sí, pinche inseguridad…».
Vía Edmundo Padilla TV.